
Sign up to save your podcasts
Or


“Señor, no me reprendas en Tu ira, Ni me castigues en Tu furor. Ten piedad de mí, Señor, porque estoy sin fuerza; Sáname, Señor, porque mis huesos se estremecen. Mi alma también está muy angustiada; Y Tú, oh Señor, ¿hasta cuándo? Vuélvete, Señor, rescata mi alma; Sálvame por Tu misericordia. Porque no hay en la muerte memoria de Ti; En el Seol, ¿quién te da gracias? Cansado estoy de mis gemidos; Todas las noches inundo de llanto mi lecho, Con mis lágrimas riego mi cama. Se consumen de sufrir mis ojos; Han envejecido a causa de todos mis adversarios. Apártense de mí, todos ustedes que hacen iniquidad, Porque el Señor ha oído la voz de mi llanto. El Señor ha escuchado mi súplica; El Señor recibe mi oración. Todos mis enemigos serán avergonzados y se turbarán en gran manera; Se volverán, y de repente serán avergonzados.”
Salmo 6:1-10 NBLA
By Iglesia La Conexión5
11 ratings
“Señor, no me reprendas en Tu ira, Ni me castigues en Tu furor. Ten piedad de mí, Señor, porque estoy sin fuerza; Sáname, Señor, porque mis huesos se estremecen. Mi alma también está muy angustiada; Y Tú, oh Señor, ¿hasta cuándo? Vuélvete, Señor, rescata mi alma; Sálvame por Tu misericordia. Porque no hay en la muerte memoria de Ti; En el Seol, ¿quién te da gracias? Cansado estoy de mis gemidos; Todas las noches inundo de llanto mi lecho, Con mis lágrimas riego mi cama. Se consumen de sufrir mis ojos; Han envejecido a causa de todos mis adversarios. Apártense de mí, todos ustedes que hacen iniquidad, Porque el Señor ha oído la voz de mi llanto. El Señor ha escuchado mi súplica; El Señor recibe mi oración. Todos mis enemigos serán avergonzados y se turbarán en gran manera; Se volverán, y de repente serán avergonzados.”
Salmo 6:1-10 NBLA