La policía, tras recibir una denuncia de una sobrina que dijo acordarse de ella tantos años después, encontró el cadáver momificado de doña Isabel en el interior de su vivienda. El cuerpo se conservó en ese estado debido a que la mujer murió de muerte natural en el baño, donde se dieron las condiciones idóneas de humedad y ventilación que favorecieron su momificación. Los médicos certificaron que la mujer podría llevar muerta, nada menos que, unos 15 años.
No es la primera, ni, lamentablemente, será la última vez que oigamos de un caso como este.