la sororidad es fundamental para el avance de la igualdad de género y la creación de una sociedad más justa y equitativa. Al entender y practicar la sororidad, las mujeres pueden empoderarse mutuamente, crear redes de apoyo, y trabajar juntas para enfrentar y superar las diversas formas de discriminación y violencia que aún existen en la sociedad.