Las suspensiones de esmalte y granilla están compuestas por una parte líquida (normalmente agua y uno o más productos químicos reológicos) y una parte sólida dispersa.
Sin embargo, estas dos suspensiones difieren en muchos aspectos, lo que puede dar lugar a resultados muy contrastados y a un enfoque diferente en cuanto al uso de productos químicos, tanto durante la fase de molienda como a lo largo de la línea de esmaltado.
Desde este punto de vista, todos los productos químicos implicados deben estar marcados con características específicas según su uso previsto.
¿Qué debemos saber sobre el tema?