Nos atrevemos a decir que absolutamente todos hemos hecho el "oso de nuestras vidas" ya sea en la calle al caernos, en alguna fiesta, en la escuela, en el trabajo o solo al abrir la boca. Pero viendo el lado positivo de las cosas, todos esos momentos son los que posiblemente nos han hecho reír a carcajadas al recordarlo o platicarlo en alguna reunión con los amigos. "Hacer el oso" se define como pasar una de las peores - o la que creemos - de las vergüenzas y en muchos casos no pasa de ser solo un momento bochornoso pero seguro nos marca para toda la vida.