¡Ya me cansé de estar sanando! Nos hemos preocupado más por sanarnos que por entender que Dios ama nuestras imperfecciones, que nos acompaña y nos ayuda a poder superar aquello que nos inquieta. No perdamos de vista que somos ¡hijos del Rey! Comparte el episodio y sígueme en mis redes sociales. @redireccionpodcast y mi cuenta personal @saulmin