Las balas que acabaron con la vida del ex primer ministro japonés Shinzo Abe todavía siguen impactando en la sociedad nipona. El magnicidio ocurrido con un arma casera el 8 de julio en pleno acto político en Nara, oeste de Japón, por parte de un exmilitar de 41 años quedó registrado y las imágenes todavía siguen circulando, a una semana del hecho. De esto, y más, conversamos con Nohelia Parra, profesora e investigadora de la Universidad de Los Andes, en el área de Relaciones Internacionales y los estudios políticos sobre Japón.