Si algo hemos aprendido de todas las películas y relatos de la guerra es que es importante prepararse. Llenar el bunker de comida enlatada y le sábanas para el tiempo de frío. En nuestra vida a veces vienen tiempos difíciles, los tiempos de las vacas flacas. Hoy quiero platicarte como el Señor, a través de mis amigas y hermanas, me enseñó a prepararme. Hoy te cuento una historia, y creo que el Señor puede servirse de esto para mostrarte algo.

No importa que esté pasando en tu vida en este momento, el Señor está contigo y te quiere feliz.

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Te mando un abrazo fuerte. Sigue adelante.

Beatriz.