Del tamaño de una canica o bolita todos tenemos un conjunto de neuronas situada en la parte más profunda del lóbulo temporal del cerebro. En la amígdala cerebral o cuerpo amigdalino se producen todo tipo de emociones que vienen del exterior (como por ejemplo, ver una araña o escuchar una buena noticia) y también del interior (como los recuerdos que nos hagan sentir felicidad o tal vez sufrimiento).