Este año el Día de la Hispanidad es más patriótico que nunca, porque ha empezado haciendo algo muy español: llegar tarde. Después de un fin de semana de rojigualdas por la calle, Guardia Civiles bailando pasodobles e Isco metiéndonos en el Mundial, lo de hoy parece el Hacendado de los días nacionales. Es como comprar polvorones el día después de Reyes: No es que no pegue, pero ya suena a gula...