Uno siempre tiene una ilusión de que alguien nuevo sea el ganador este año. De que los poderosos de siempre caigan y un nuevo origen se cree, demostrando que los equipos poco coperos pueden ganar y rascar un poco de la gloria que los grandes clubes acaparan. El 2004 nos trajo una épica, pero ¿Puede haber una secuela? Tottenham, Crystal Palace, Bolonia, Stuttgart, y otros equipos dicen que sí.