Aunque Nehemías tenia una vida de lujos, y una posición alta del palacio de Persia, jamás se olvidaba de los que regresaron a Jerusalén, para reconstruir el pueblo santo, antes de la llegada de Cristo.
Aunque Nehemías tenia una vida de lujos, y una posición alta del palacio de Persia, jamás se olvidaba de los que regresaron a Jerusalén, para reconstruir el pueblo santo, antes de la llegada de Cristo.