Cada vez que tiene que cruzar el parque Miguel piensa"ojalá tuviera un pero". Se llamaría W y sería tan grande que los chicos mayores le tendrían miedo.
Esta historia pertenece a Renate Welsh, con ilustraciones de Antge Burger. Publica la editorial SM en la colección Catamarán, que está recomendada par niños y niñas a partir de 7 años.