Un anciano que hacía 20 años que no mantenía relaciones sexuales recibe como regalo para su cumpleaños 90 un trío con otras dos abuelas.
Tanta energía acumulada tenían que a causa de la fricción de sus propios cuerpos levantaron tanta temperatura que se generó un fuego y se quemaron vivos sin dejar ni un segundo de amarse y amarse.
Fuí hasta Canadá a cubrir este caso. Si querés colaborar con las investigaciones para que pueda seguir trayendo estos casos y viajando al lugar de los hechos, podés hacerlo en patreon.com/correapalacios
Gracias por escuchar.