Es este mito la razón por la cual ponemos ramas de muérdago en los techos y en los umbrales de las puertas durante la época de la navidad y tenemos que besarnos al pasar por debajo de él, porque el muérdago, que fue completamente desestimado y luego tomado por un arma, quería ser visto por Frigg tras ser el motivo de la muerte de su hijo, con algo relacionado con el amor y no con la violencia.