David a este punto ya había pasado por muchas dificultades y pruebas.

Experimentó fama repentina, incluso podríamos decir que era mayor que la del rey, se acababa de casar con la hija de Rey, se enfrentaba a los filisteos en batalla y los derrotaba, y luego tuvo repetidos atentados contra su vida de su propio Rey y tuvo una dolorosa despedida de su mejor amigo, y se despidió también de la tranquilidad del palacio y de una vida normal, para vivir como fugitivo durante un tiempo indefinido dentro de una cueva.

Osea que pasó del palacio a la cueva.

No podía ir a su casa, no podía ir al palacio, no podía ir a ver a Samuel, no podía ir a ver a Jonatán, no podía ir a la casa del Señor. Pero sí podía ir a una cueva y hallar refugio.

Iglesia Bíblica Petra

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