Con la caída del franquismo en 1975, y los once años que siguieron llenos de complicaciones para tratar de concretar el regreso a España de la democracia, la juventud que había luchado tanto contra la dictadura se vio con una libertad, para ellos, sin precedentes. Tomando gran inspiración del punk stadounidense, el post-punk británico y el new wave (que ya dominaba frecuencias de todo el mundo), comenzaron a salir bandas, aparentemente, de todos lados. Y no solo eso, sino que muchas, a pesar de ser principiantes o poco conocidos, tuvieron la oportunidad de grabar álbumes de estudio, maquetas profesionales y de presentarse en televisión y festivales españoles importantes.