¿ Qué es mejor para unos y que es mejor para otros?
¿Quién sacaría mayor provecho de rezar solamente?
¿ Quién necesita tan sólo una sonrisa, al no estar aún listo para nada más?
Nadie debe tratar de responder a estas preguntas por su cuenta.
Es indudable que ningún maestro de Dios ha llegado hasta este punto sin haberse dado cuenta de esto.
El programa de estudios es sumamente individualizado, y todos sus aspectos están bajo el cuidado y la dirección especial del Espíritu Santo.
Pregunta y Él te contestará.
Ésa es Su responsabilidad, y solo Él está capacitado para asumirla.
Responder es Su función.
Dirigirle a Él tus preguntas es la tuya.
¿Querrías ser responsable de decisiones sobre cuyos antecedentes entiendes tan tan poco?
Alégrate de tener un Maestro que no puede equivocarse.
Sus respuestas son siempre acertadas ¿Podrías tú decir lo mismo de las tuyas?