El tema de hoy es las seguridad, muchas veces menospreciada por nuestro ritmo de trabajo del día a día, pero infinitamente importante como vamos a descubrir hoy aquí.
Uno de los aspectos que debería importarnos tanto como la captación de alumnos, creación de contenidos formativos o, inclusive, la gestión de los pagos como vimos en el anterior capítulo, es proteger todo nuestro ecosistema y, obviamente, demostrar objetivamente que lo hacemos.
Ganaremos confianza entre nuestros seguidores por el hecho de de ofrecerles un entorno digital de formación protegido donde sus datos, tanto personales como de participación, están bien custodiados.
A lo largo del capítulo de hoy descubriremos aspectos de seguridad activa y pasiva con lo que asegurar la estabilidad. No solo de nuestras plataformas de e-learning, si no también de nuestro negocio.
Cuando sufrimos un ataque informático debemos de tener las espaldas bien guardadas y proteger nuestro medio de vida profesional.
Empecemos hablando sobre qué métodos seguros debemos considerar y en qué situaciones aplicaremos.
Seguridad. Aspectos con sentido común
Securizar es nuestra misión en todo lo relativo a accesos a la plataforma, vulneración de los datos que almacenemos y, por supuesto, proteger el momento de hacer los pagos de nuestros alumnos virtuales.
Porque desde fuera nos tienen que percibir como la solución de aprendizaje segura y tenemos que demostrarles a nuestros estudiantes que sus datos estarán a buen recaudo, durante el pago y la posterior utilización de la herramienta online que ponemos a su disposición.
Si lo recordáis, hace algunos capítulos hablamos sobre los los certificados de seguridad SSL y la importancia de cifrar las conexiones entre el usuario y el servidor.
Esto mejora la seguridad real y la perceptiva de los alumnos potenciales que se interesen en nuestras soluciones de formación online y nos contraten a través de nuestra plataforma de pago digital.
Hoy vamos a hacer un pequeño resumen de los aspectos más relevantes que deberíamos considerar, pero en futuros capítulos del podcast ampliaremos con mayor detalle y buenas prácticas para que la seguridad deje de ser algo abstracto para nosotros.
Y dicho esto, hablemos de cuanto estamos expuestos diariamente a fallos de seguridad y vulnerabilidades en Internet, por lo que blindar nuestra plataforma de e-learning será uno de nuestros principales cometidos del día a día.
¿Por que es importante seguir buenas prácticas a diario en seguridad?
Principalmente, porque hay dos tipos de mecanismos que fortalecen la estabilidad de nuestro proyecto de formación online y hay que ser tenaces en estos asuntos para beneficiarnos de la tranquilidad.
Seguridad activa: Aquella que impide que nos ataquen de alguna manera.
Seguridad pasiva: La que nos ayuda a reestablecernos cuando el caos ocurre.
¿Cómo aplicamos la seguridad activa?
Principalmente es usar el sentido común en muchos aspecto como vamos a ver a continuación.
Primero, empecemos hablando de uno de los elementos en seguridad que más importante debería de considerarse pero que, por razones de comodidad, se suele menospreciar muy amenudo.
Contraseñas robustas e infranqueables
La fortaleza de nuestras contraseñas y los requerimientos mínimos que deben tener para nosotros y nuestros estudiantes.
Seguro que conocéis de muchos usuarios que utilizan como passwords fechas de nacimiento o palabras sencillas de recordar que les hacen un flaco favor para protegerse.
Evitar todo esto simplemente aumentando la longitud y complejidad con números, caracteres especiales (*,#,$,€….), mayúsculas y, por supuesto, nada de tomar algo personal como el nombre de un hijo o la matricula del coche como base para construirla.
Para los alumnos de nuestro campus virtual, podemos pensar en aplicar estos condicionantes anteriores al momento de su registro. Podéis establecer, por ejemplo, que no indiquen menos de 7 caracteres para impedir que pongan su fecha de nacimie...