En este episodio conversamos sobre muchas cosas que vivimos y recibimos. Pero sobre todo, sobre la experiencia de compartir una comunidad inspirada y alimentada por el Espíritu Santo.
Título inspirado en el evangelio de Marcos 2 "3Y vinieron trayéndole un paralítico llevado entre cuatro 4y, como no podían presentárselo por el gentío, levantaron la techumbre encima de donde él estaba, abrieron un boquete y descolgaron la camilla donde yacía el paralítico. 5Viendo Jesús la fe que tenían, le dice al paralítico: «Hijo, tus pecados te son perdonados». 6Unos escribas, que estaban allí sentados, pensaban para sus adentros: 7«¿Por qué habla este así? Blasfema. ¿Quién puede perdonar pecados, sino solo uno, Dios?». 8Jesús se dio cuenta enseguida de lo que pensaban y les dijo: «¿Por qué pensáis eso? 9¿Qué es más fácil, decir al paralítico: “Tus pecados te son perdonados”, o decir: “Levántate, coge la camilla y echa a andar”? 10Pues, para que veáis que el Hijo del hombre tiene autoridad en la tierra para perdonar pecados —dice al paralítico—: 11“Te digo: levántate, coge tu camilla y vete a tu casa”». 12Se levantó, cogió inmediatamente la camilla y salió a la vista de todos.