Durante años, decenas de series históricas y épicas —de Britania a The Witcher, de Marco Polo a Rey y Conquistador— han intentado convertirse en “el nuevo Juego de Tronos”. Ninguna lo logró. Ninguna, salvo Selling Sunset.
Detrás de sus tacones imposibles, mansiones millonarias y vestidos de alta costura, este reality es en realidad un tablero de alianzas, traiciones y poder, donde cada cena acaba en guerra y nadie se atreve a probar bocado.
En este programa analizamos por qué Selling Sunset es el fenómeno televisivo definitivo: un espectáculo de mamarrachismo elegante, drama calculado y lujo desmesurado, que ha elevado la telerrealidad a la categoría de tragedia griega.
Desde las peleas por protagonismo y los bandos enfrentados hasta la ruptura de la cuarta pared y la implosión emocional de su novena temporada, exploramos cómo el Oppenheim Group pasó de vender mansiones a venderse a sí mismas como imperios de fama.
Porque Selling Sunset no es un placer culpable: es placer puro, sin culpa y sin frenos.
Un vuelo de Ícaro en tacones de aguja… hermoso, caótico y absolutamente irresistible.