A Sánchez no le cabe un cacahuete a martillazos.
El patético show del jefe del PSOE en el Valle de los Caídos acredita sus nervios y prisas por tapar los follones de su cónyuge
A lo mejor hay quien pica, porque en España hay más tontos que botellines, pero andar resucitando permanentemente una guerra que terminó hace 85 años y ganó un general muerto hace 49 es de una estulticia notable.
Memez que airean histéricos los sumisos periodistas de la ‘Brunete Pedrete’, que por cierto han recibido en los últimos tiempos cerca de cien millones de euros de nuestros impuestos en forma de publicidad oficial.