¿Para dónde voy?, ¿que estoy haciendo de mi vida?, si desaparezco de la faz de la Tierra ¿cual sería mi marca en este mundo?, ¿que debo hacer?. Si eres de los pocos que a respondido a todas etas preguntas y feliz mete lo dices a los cuatros vientos… pues bueno, me imagino que estas satisfecho con lo que has logrado y vas por un buen camino. Pero si no lograste responder a estas preguntas o tu respuesta no te a dejado con buen sabor de boca, creo que necesitas re-valorar tu vida. No es tan difícil Como suena y no, no todo está perdido. Si acabas de descubrir que lo que estas haciendo no te hace feliz del todo es un buen inicio por que ahora sabes que es lo que tienes que cambiar. Veras, todos necesitamos una meta en la vida una razón para vivir, por que eso será nuestro impulso del día al día, todas las cosas tienen una función en especifico, todo se a creado para que sirvan de una determinada forma por ejemplo la función de una silla es que te puedas sentar en ella, una cobija te brindara abrigo en las noches frías, un auto te transporta de un lugar a otro, las plantas te brindan oxigeno y alimento en fin imagino que ya has captado la idea. De la misma forma nosotros como personas también necesitamos de un propósito. Y antes de que se me adelanten dando excusas. Les contare un poco de las tres clases de reacciones de las personas cuando las afrontas a su realidad. La primer clase “Los que tienen todo”, Estos son los que me van a decir: -Yo ya tengo todo lo que quiero en esta vida, tengo una buena familia, un gran empleo, estabilidad económica, mi vida social esta genial, mi situación mental, espiritual y emocional están en orden y pues no, no necesito de ese propósito que dices por que ya lo cumpli. Lo que te puedo decir con una respuesta como esa es felicidades, que bueno que has logrado todo lo que te has propuesto, pero a no ser que planees dejar de existir en este momento ya deberías buscar un nuevo proposito o seguir creciendo y evolucionando el que ya desarrollaste. Mi recomendación: solo ten cuidado con no caer dentro de esa linea tan delgada de la zona de Conford. (pero dejaremos ese tema para otra coacción). Luego vienen las personas que entran en la segunda categoría “Los perdidos”. En esta clasificación entran… me atrevería a decir que hasta el 70% de la población. Ellos son los que me dicen: -“no tengo una idea de que estoy haciendo ni por que”, -“no estoy seguro de que es lo que quiero, nada me gusta”, o hasta un “no le encuentro sentido a mi vida”. Suena grabe ¿verdad?. Pero la realidad es que todos pasamos por esa etapa en algún momento de nuestras vidas. Que también te voy a decir, si ya te diste cuenta que perteneces a este grupo de “perdidos”, acabas de dar el primer paso, que es concientizarlo. Y por ultimo nuestro 25% los que entran en la tercer categoría. “ Hago todo y nada”. Estos son los que ya estudiaron 2 o 3 carreras diferentes y las botaron, o los que si terminaron pero no se dedican a ninguna y en fin andan como velero a donde lo lleve el viento sin rumbo fijo, hacen poquito aquí y allá pero siguen si descubrir su pasión. Si tu te identificas dentro esta clasificación, déjame decirte que inconscientemente lo estabas haciendo bien, por que no te has dado por vencido y lo sigues intentando una y otra vez. Ahora te encuentras en el periodo de exploración. Si ya lo intentaste por un lado y te diste cuenta que no te dio por ahí y luego trataste algo diferente y tampoco fue lo tuyo, tal vez lo que te hace falta es sentarte un ratito solo, respirar profundo, relajarte y platicar con tu yo interior de una forma mas consciente, con los pies en la tierra y preguntarte: -¿que es lo que tengo?, y con esto, ¿que puedo crear?, si hago esto, ¿me hará sentir feliz?. Si de todo lo que tienes ahora nada te hace sentir feliz y pleno, esta bien que lo abandones, suéltalo, déjalo, estas a tiempo, busca tu propósito, persigue tus sueños, has eso que te palpita, eso que te hace cosquillas en el estomago.....
