Hay muchos ejemplos de cosas que parecían imposibles pero la ciencia volvió real.
A lo largo de la historia, Dios ha elegido a las personas más insignificantes para hacer cosas asombrosas y así demostrar que todo lo que necesita es un corazón dispuesto y rendido a El.
Te invito a creer por lo imposible.
Conoce más sobre nosotros en https://www.ilderhidalgo.com/