Amor, comprensión, confrontación y fidelidad serán encontrados en el único amigo que jamás te defraudará: Jesús.

Es fácil involucrarse en el mundo de los vicios, salir de ellos, no lo es tanto. Solo el poder de Jesucristo puede cambiar la vida de cualquier persona que acuda a Él, para darle su corazón, totalmente.

Esta reflexión te llevará a responder dos cuestiones: ¿Estás listo para iniciar esta etapa? y ¿Tu matrimonio será bendición para ti y para quienes te rodean?

¿Noviazgo sin compromiso? El noviazgo y las responsabilidades también se enseñan. Antes de pensar en el noviazgo, se debe aprender a trabajar, a ser responsables.

Nadie puede evadir las responsabilidades. Nadie puede evitar estar bajo autoridad. Los jóvenes deben considerar a sus padres como los instrumentos de Dios para el apoyo en su crecimiento y madurez.

El trabajo es bendición de Dios. Debemos trabajar sin descuidar la responsabilidad primordial que hemos recibido: La Familia.

Las decisiones bien pensadas bajo la dirección del a Palabra de Dios, traen como resultado, abundantes bendiciones. Por otro lado, una mala decisión, conlleva consecuencias que nos afectan por mucho tiempo.

La familia como bendición de Dios debe ser bien cultivada para disfrutar de una cosecha segura de estabilidad, gozo y tranquilidad

Lamentamos perder oportunidades en nuestra vida. Sin embargo, siempre se nos presentan segundas oportunidades. La pregunta en esta ocasión es, ¿Habrá una segunda oportunidad después de rechazar el llamado de Cristo?

El matrimonio es la institución establecida por Dios para bendición de quienes lo conforman. Para perdurar y trascender, se requiere del esfuerzo mutuo y del amor mutuo. Para amar, necesitas a Cristo como el fundamento de tu vida