Hay cosas en esta vida que son difícil de enfrentar. Otras son difíciles de escuchar.  Pero siempre va a haber el ejemplo de aquél que lo hizo a la perfección.

Luchas, pruebas, batallas. Todas ellas siempre van a llevarnos a ser la mejor versión de nosotros. Lo importante es que no fijemos nuestra vista en lo que está adelante, si no en aquellas cosas que no se ven.  Veamos que al final seremos más fuertes y no solo oiremos del invisible si no que la experiencia será mucho más profunda.

La soledad no es un estado o sentimiento que nos agrade. Muchas veces podemos sentirnos solos aunque estemos rodeados. Sin embargo hay uno que nunca dejará que estemos solos. Él ha prometido estar todos los días de tu vida contigo.

Uno de los dones más hermosos que existe es el de ayudar a los demás desinteresadamente. Esto es una de las mayores muestras de amor que podemos dar.

Todos conocemos las batallas, porque la vida se compone de ellas. Son experiencias que muchas veces nos marcan para siempre. Aprendamos que la victoria no está en las armas que tienes, ni tan siquiera depende completamente de ti.

El tesoro más grande de la vida no se encuentra en el fondo del mar, o dentro de una pirámide de un gran faraón. Se encuentra en nuestro hogar.

Cuántas veces hemos terminado heridos por lo que aparenta ser amor, sin embargo no hemos probado aún el verdadero significado del amor.