La incertidumbre en estos días ha subido a niveles extraordinarios. Esta condición ha dejado a muchos sin poder desarrollar la esperanza a través de la fe. Es como si todos los esfuerzos son en vano y ya no hay razón para desarrollar metas. Pero Dios nos llama a confiar en él en tiempos inciertos. El nos da un hogar de paz en medio de la tormentas.

la incertidumbre en estos días ha subido a niveles extraordinarios. Esta condición ha dejado a muchos sin poder desarrollar la esperanza a través de la fe. Es como si todos los esfuerzos son en vano y ya no hay razón para desarrollar metas. Pero Dios nos llama a confiar en él en tiempos inciertos. El nos da un hogar de paz en medio de la tormentas.

Hay una gran diferencia entre pruebas y adversidades. Las pruebas vienen para promover nuestra fe la adversidad viene para promovernos. Cuando veas que se levante una fuerte adversidad contra ti prepárate que tu promoción está cerca.

El milagro de Dios para tu vida no es sistemático. Mientras muchos esperan el movimiento de Dios otros provocan la misericordia de Dios. Tu fe y perseverancia manifiesta lo imposible.

A veces las instrucciones de Dios no hace sentido especialmente cuando estamos pasando por dificultades. Pero cuando llevas tu fe al lugar donde comprende que no tienes nada que perder y rindes a las instrucciones de Dios es que recibes tu milagro.

Pastores Carlos y Ruth Caban comparten la recuperación El virus y las lecciones que aprendieron en el camino. Mensaje de inspiración que la victoria está segura.

La fortaleza que nos entrega Dios Es reflejada en los momentos de luchas y pruebas. La confianza para confrontar nuestras adversidades viene de la paz que Dios deposita en nuestro corazón.

Lo más fácil de una lucha es decidir comprometerse a la victoria lo más difícil es mantener ese compromiso delante de los esfuerzos de tu adversario. En estos tiempos inciertos crear esperanza es un reto pero es la única manera de vencer.

Dios siempre está pendiente de nosotros. Nada nos separará del amor de Dios.

El poder está en la unidad es el llamado de Dios para su pueblo. Durante los primeros eventos que establecieron la iglesia el pueblo tenía poder y autoridad por su habilidad de mantener su unidad. Hoy Dios nos llama a mantener vivo este legado de amor es lo que puede cambiar el mundo.