La habilidad no es no tenerle miedo al fracaso, sino que al pasar de los años crezcas y ese miedo no te detenga de lo que debes de hacer. Dios no promete por ti, sino a pesar de ti. Caminar es aprender a agradecer por lo que tienes en las manos porque el agradecimiento transforma la espera en esperanza. La mayoría de nosotros no fracasamos, sencillamente dejamos de probar. Tu tarea en la vida no es abrir el frasco, es aflojarlo y dejar que otros lo abran por ti. Debes insistir, aprender y repetir.