Que si no es de Dios, que es aburrido, que es para señoras, que es para funerales... Esas y mil cosas más en contra del Rosario hemos escuchado. La verdad, es que nunca ha habido ni habrá arma tan poderosa como el Rosario para combatir el mal y llegar al cielo. Ojalá que te sirva un montón y que te sea de mucha bendición.