Vivimos en un mundo en el cual cada vez se reclama mas por derechos, pero cada vez menos se asumen responsabilidades. Un mundo en el cual, las marcas se aprovechan de esto, e intentan normalizar situaciones o estados que no son los óptimos para el desarrollo personal o profesional, lo cual reafirma aun mas en estas personas, que esa "zona de comfort" es el camino adecuado para su felicidad. Claro está que la felicidad es muy subjetiva, pero cuando estos hábitos que se están normalizando pueden derivar en problemas de salud, pues entonces tenemos un problema que puede derivar en causas, muy severas.