Dado que los hablantes de lenguas romances son numerosos en todo el mundo, es fundamental distinguir la ideología nazi disfrazada.

Si un coordinador de grupo, un político, una figura religiosa o cualquier otra persona aborda ideas de exclusión social en su discurso, como el de un obispo español, cual declarando que las personas con discapacidad, las personas diferentes o incluso las mujeres nacen en pecado o que algunas merecen vivir y otras no... estás escuchando un discurso fascista, y quien lo pronuncia es una persona peligrosa, que propaga ideas lamentables dentro de grandes grupos, que desafortunadamente le escucha, creando así odio y una dinámica criminal indeseable.

Un tal discurso pone en peligro muchas categorias de personas, un peligro real, dando sea que las crimenes de odio y la violencia domestica se estan manifestando sin parar. Queremos reducir el numero de muertos por odio sin razon, no amplificarlo.

Si te dicen que quienes nacen diferentes no son iguales, es porque esa persona influyente no ha leído el libro que le da a comer, o si lo ha hecho, ha sido engañada por una mala traducción de un nazi.

Ningún libro espiritual importante del mundo te anima a considerar a tus hermanos o vecinos inferiores; todo lo contrario. He escuchado muchos discursos fascistas disfrazados en los últimos años, y se nota en dos minutos si su contenido está influenciado por la literatura nazi.

Si el contenido es fascista, la difusión de información sera peligrosa. Cuando no se orienta hacia la diversidad y la inclusión, que es el ingrediente principal de una coordinación social eficaz, independientemente de la edad del grupo, el mensaje puede saltarse y el emisor reorientado hacia la ayuda psicológica.