Voy a resumir los 12 días que llevo practicando. Los dos tres primeros días tengo una sensación de pasotismo. El móvil se estropeó y sigue roto a día de hoy. Esto me vino muy bien para la inmersión en esta práctica o retiro de 30 días. La sensación de pasotismo va dando paso a la gratitud. Porque cada nuevo día es un milagro o un regalo. Los proyectos y las preocupaciones se quedan en segundo plano. Esos días me doy cuenta de que tengo más conciencia, disfruto de las pequeñas cosas y valoro mucho mi vida, estoy contento sigo haciendo lo mismo pero sin agobiarme por nada.
Ya no tengo urgencia en mis proyectos, espero que a final de los 30 días, se muera el ego, la verdadera causa de los problemas, el falso yo. Voy a seguir haciendo mi vida normal por ejemplo el 27 de abril estaremos en la Biblioteca de Valdepeñas impartiendo un Taller de Felicidad, y tal vez tenga tiempo de grabar alguna entrevista para el podcast si dios quiere. Espero tengas un buen día, buen finde y buen mes.
Que se cumplan todos tus deseos, y recuerda que sólo puedes ser feliz hoy, aprovecha el momento. Vive hoy, aquí ahora sin miedo.