Cuando lleguen los días malos a nuestras vidas o a los demás nos tenemos que mantener orando para que no nos falte nuestra fe.

En quien tenemos puesta nuestra confianza en momentos de crisis.

Debemos estar conscientes de lo que dice la palabra de Dios de que todo obra para bien y aprender a superar las adversidades que se nos presentan en la vida.

Ten la seguridad que nuestro Señor Jesucristo , tiene todo bajo control. Que aún los peores momentos tienen una fecha de caducidad, porque su poder no es limitado como el nuestro.

En estos tiempos que vivimos hay que hacer buen uso de nuestro tiempo. Crear un altar familiar donde estemos en comunión con nuestros prójimos y con el Señor

En medio de la tormenta puedes tener paz si pones tu confianza en Dios. Además de ayudar a otros a encontrarla hablando de la fe en el Señor.

Debemos prepararnos para la pandemia, pero más importante aún. Debemos aumentar nuestra comunión por medio de la oración con Dios que nos protege en todo momento.

La única forma de sanar el corazón es un encuentro con Jesús. Las épocas han cambiado los personajes han cambiado pero las aflicciones y el que las puede curar no.

Una mente renovada, es necesaria para ver los frutos del Espíritu Santo.

Para derrotar tus gigantes, debes prepararte y estar confiado que Dios te dará la victoria. No es la arma que uses, sino lo que Dios hará con ella.