Tenemos el mismo origen divino y el mismo potencial ilimitado por medio de la gracia de Jesucristo.

Que cada uno de nosotros aprenda a hablar y a escuchar con Su amor aquí, en nuestros corazones y hogares, en nuestros llamamientos, en las actividades, en la ministración y en el servicio en el Evangelio.

Mediante las bendiciones del templo, el Salvador sana a las personas, a las familias y a las naciones.

Los padres se asocian con su Padre Celestial para guiar a sus preciados hijos de vuelta al cielo.

¡Nuestra necesidad de reconocer la verdad jamás ha sido más importante!

Céntrense en Jesucristo, Él es nuestro Salvador y Redentor, es lo “señalado” que debemos ver y es nuestro mayor tesoro.

https://www.churchofjesuschrist.org/study/general-conference/2023/10/57renlund?lang=spa

Ustedes y yo tenemos la oportunidad de tener la compañía constante del Espíritu Santo.

Jesucristo no es solamente nuestro héroe, Él es nuestro Señor y Rey, el Salvador y Redentor de la humanidad.

Aunque las decisiones pudieran haberlos alejado del Salvador y de Su Iglesia, el Maestro Sanador se encuentra en el camino que conduce a casa, dándoles la bienvenida.

Testifico que los “pacíficos discípulos de Cristo” hallarán paz personal en esta vida y una reunión gloriosa en el cielo.

https://www.churchofjesuschrist.org/study/general-conference/2023/10/44cook?lang=spa