Del libro Ecología Emocional de Jaume Soler y Mercè Conangla
Principio 1: La autonomía personal
"Ayúdate a ti mismo y todos te ayudarán."
Este principio nos invita a hacernos cargo de nuestra vida con responsabilidad y amor propio. Cuando alguien se ayuda a sí mismo —buscando su bienestar, tomando decisiones coherentes y cultivando su crecimiento interior— se vuelve más capaz de tener relaciones sanas. En lugar de esperar que otros nos salven, este enfoque fomenta el autocuidado y la madurez emocional. Solo desde un lugar pleno y en equilibrio podemos dar lo mejor a los demás.
Principio 2: Prevención de dependencias
"No hagas por los demás lo que ellos pueden hacer por sí mismos."
Aquí se nos muestra la importancia de no caer en el rol del “salvador”. Muchas veces, desde el amor o el miedo, resolvemos la vida de los demás y eso genera dependencia. Este principio nos recuerda que el verdadero apoyo es empoderar, no reemplazar. Al permitir que los otros enfrenten sus propios desafíos, crecen, maduran y se hacen responsables de su vida. Y nosotros también.