Una promesa, no es más que un compromiso que se adquiere, es cuando empeñas la palabra.
El esquema que sigues en tu vida, debe ser el de cumplir con ese valor que tus padres te enseñaron desde el momento mismo que te concibieron.
Tienes que valorar, honrar ese compromiso, cuidarlo, y si es necesario, colocar tu vida por delante.