Solemos hundirnos en el mar de nuestras ansiedades y frustrarnos ante el espejo de nuestros complejos. Nos ahogamos en la frialdad de las trivialidades que nos mantienen atados entre las paredes de nuestros abismos.
Solemos hundirnos en el mar de nuestras ansiedades y frustrarnos ante el espejo de nuestros complejos. Nos ahogamos en la frialdad de las trivialidades que nos mantienen atados entre las paredes de nuestros abismos.