Los lderes sin propsito, son como barcos sin timn. Pueden ser carismticos y elocuentes, llenos de pasin y vigor, pero se mueven sin rumbo fijo y sin direccin. Sus decisiones a menudo se basan en los resultados de encuestas en lugar de sustancia y principios. Ellos hablan sin decir nada rodeando el asunto en lugar de atacarlo de frente. Sus seguidores se sienten frustrados, desilusionados y se vuelven desleales. Por otro lado, los lderes exitosos tienen un sentido distinto de la misin. Ellos pueden dirigir con destreza sus embarcaciones hacia el destino deseado y motivan a los dems a seguirles. Sus decisiones estn basadas en principios slidos y se basan en el panorama general en lugar de la opinin popular o los caprichos emocionales de alguien. Ellos pueden comunicar claramente sus objetivos a sus seguidores y medir el xito con ms que solo sentimientos. Sin embargo, sin importar cun grandioso sea el lder, ninguna misin puede ser cumplida sin la participacin entusiasta de sus seguidores. Por consiguiente, dentro del contexto de una misin corporativa, cada individuo necesita tener una misin personal.
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