Desde la Diócesis de Tui-Vigo, a través de la Vicaría de Pastoral y la delegación de Medios de Comunicación Social, te proponemos este itinerario de espiritualidad para rezar con el Evangelio de cada día desde la Cuaresma hasta Pentecostés.

Reflexión escrita por el sacerdote diocesano Gonzalo Otero.

Música © Mingos Lorenzo.

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El Evangelio de hoy nos presenta el milagro de la multiplicación de los panes y los peces. Jesús, sintiendo compasión ante tal multitud, obra este signo. Nadie sin alimento. Jesús invita a los apóstoles a que sean artífices de la caridad y de la generosidad. Cuántos hombres y mujeres de fe a lo largo de la historia han sentido esta vocación, esta dedicación pastoral de compartir, de multiplicar los bienes y alimentos para sofocar el drama de la pobreza y del hambre. Contemplando, amando y sirviendo al mismo Jesús en los pobres, besando sus manos, lavando sus pies, curando sus llagas.

En nuestro mundo moderno, también desconcertado y hambriento, Jesús nos invita a los creyentes a la continuada multiplicación de su Pan, del alimento a quien más lo necesita. Nos dice San Pablo que la caridad de Cristo nos apremia, nos urge. La caridad siempre es urgente, siempre es compasiva y generosa. Donde hay caridad y amor, allí está el Señor. Ayúdanos Jesús Resucitado a buscarte, amarte y servirte en el cuerpo sufriente de los hermanos, en todos aquellos que, entre nosotros, sufren las trágicas consecuencias económicas y laborales de esta pandemia que sufrimos.