Las mortales inundaciones en Texas dejaron más de un centenar de muertos, decenas de desaparecidos, y pueblos literalmente arrasados.
Para explicar los factores tras la tragedia, los entendidos han apuntado a lo repentino y la intensidad de las lluvias, sumado a la geografía de Texas. Sin embargo, la gestión de la emergencia ha sumado los principales cuestionamientos.
¿Qué falló en la prevención de este desastre? En #SinPretexto conversamos al respecto con Michel de L’Herbe, consultor en gestión de emergencias.
"El fenómeno de clima extremo genera lluvias en corto periodo de tiempo, muy intensas y eso estresa a los sistemas de emergencia y la planificación y ordenamiento territorial que termina por no resistir", señaló.
Ante ello, agregó "los sistemas de emergencia deben apurar el tranco en términos de preparación comunitaria y sus sistemas de alerta".