La Biblia nos enseña que Dios es un Dios de segundas oportunidades. En el libro de Jonás, vemos cómo Dios le da una segunda oportunidad al profeta Jonás para que predique a los ninivitas. Jonás 3:1-2 dice: "Y vino la palabra del Señor a Jonás por segunda vez..." Dios no se rinde de nosotros, incluso cuando fallamos.
Otro ejemplo bíblico es el de Pedro, quien negó a Jesús tres veces. Sin embargo, en Juan 21:15-17, Jesús le da a Pedro una segunda oportunidad para que se arrepienta y sirva a Dios. Jesús le pregunta a Pedro: "¿Me amas más que éstos?" Pedro respondió: "Sí, Señor, tú sabes que te amo". Dios nos da la oportunidad de rectificar nuestros errores.
La historia de David y Betsabé es otro ejemplo de cómo Dios nos da segundas oportunidades. Aunque David cometió un gran error, Dios no lo rechazó. En Salmos 51, David se arrepiente y pide perdón a Dios. Dios lo restaura y lo utiliza para grandes cosas. Dios nos da la oportunidad de empezar de nuevo.
En 2 Corintios 5:17, la Biblia dice: "Así que si alguno está en Cristo, es una nueva creación; las cosas viejas pasaron, he aquí que todas son hechas nuevas". Dios nos da la oportunidad de empezar de nuevo, de dejar atrás nuestros errores y de seguir adelante con fe y esperanza. ¡Aleluya!