En Hechos 17:24-31, Pablo nos recuerda que Dios ha mostrado paciencia, pero ahora manda a todos que se arrepientan, porque ha establecido un día en que juzgará al mundo con justicia, por medio de Jesús, a quien resucitó como prueba de su autoridad.
Esto no es una amenaza, es una invitación urgente al arrepentimiento y a la gracia.Dios quiere corazones rendidos, no solo rituales.
Hoy es un buen día para volver a Él.