Todos necesitamos ser animados, y debemos hacer lo mismo con quienes nos rodean. Pero no podemos hacerlo por nuestra propia fuerza. Dios que nos llama es fiel, y cumplirá todo esto. Con su ayuda, podemos animarnos unos a otros todos los días.
Todos necesitamos ser animados, y debemos hacer lo mismo con quienes nos rodean. Pero no podemos hacerlo por nuestra propia fuerza. Dios que nos llama es fiel, y cumplirá todo esto. Con su ayuda, podemos animarnos unos a otros todos los días.