Salmo 139:7-10 NVI ¿A dónde podría alejarme de tu Espíritu? ¿A dónde podría huir de tu presencia? Si subiera al cielo, allí estás tú; si tendiera mi lecho en el fondo de los dominios de la muerte, también estás allí. Si me elevara sobre las alas del alba, o me estableciera en los extremos del mar, aun allí tu mano me guiaría, ¡me sostendría tu mano derecha!
El Señor está presente en todos los procesos de nuestra vida, somos como el barro en sus manos, El es nuestro Alfarero y con su amor somos perfeccionados para ser más como Cristo