Dios siempre piensa en nosotros. Se acuerda que somos polvo. Salmo 103:14. Tiene sobre nosotros pensamientos de paz y no de mal, y se propone darnos al fin la recompensa que tanto anhelamos. Jeremías 11:29.
Dios siempre piensa en nosotros. Se acuerda que somos polvo. Salmo 103:14. Tiene sobre nosotros pensamientos de paz y no de mal, y se propone darnos al fin la recompensa que tanto anhelamos. Jeremías 11:29.