No tenemos porque desconfiar de la providencia de Dios. En estos momentos la providencia de Dios hay que mirarla con ojos espirituales, y no con ojos materiales. Ya que podremos caer en decir "me esta yendo muy mal en mi negocio", te quiero preguntar "tienes el virus, tu familia", entonces Dios sigue a tu lado, aunque veas que no estas ganando dinero, Dios te esta bendiciendo.
DALE LA GLORIA A DIOS.