Una pérdida siempre va a estar acompañada de conmoción, bloqueo, tristeza, negación, desesperanza, ansiedad, enojo, culpa, soledad, depresión, impotencia, alivio y anhelo; y cada una de estas conllevará a un duelo, y por lo tanto habrá, indudablemente, una ruptura en tu cotidianidad. Un tema con el psicólogo Edoardo Santano.