Las recompensas de los justos
La inspiración de Dios actúa en todos. Sin embargo, hay personas en quienes la inspiración divina parece no tener efecto; personas que cometen crímenes de manera fría y que nunca se alegran ante lo verdadero y lo hermoso. Aunque parezcan prosperar, su castigo está asegurado incluso en este mundo. Las ansiedades y temores que los asaltan hacen que su prosperidad se convierta en
amargura para ellos. En cuanto a los justos, aunque su paso por la vida esté a menudo marcado por la desgracia, la satisfacción interna de obedecer la inspiración divina les da una gran fortaleza y es recompensa suficiente para