Comenzamos el Nuevo Año Litúrgico 2025. Y los textos litúrgicos en sus tres Ciclos hablan del fin de los tiempos. Pero el acontecimiento principal que anuncian no es el fin del mundo sino la venida del Señor y los evangelistas nos dan la señal de alerta invitándonos a estar preparados y vigilantes para esta inminente venida del Señor, esta vigilancia es sobre todo una actitud atenta  pero sobre todo es una disposición  necesaria para que la venida del Señor no nos tome desprevenidos. Porque de lo contrario le podemos dejar pasar de largo. Inaugurar un Año Litúrgico, no es otra cosa que reemprender el camino. Los cristianos somos un pueblo siempre en camino codo a codo con los hermanos hacia la ciudad eterna la Casa del Padre. Un camino en el cual estamos siempre expuestos a los riesgos de sufrir la sed, el cansancio, la inseguridad, el hambre y peligros de toda clase, pero para no desfallecer por este camino de regreso a casa, debemos armonizar nuestro caminar al caminar de Cristo, nuestro querido Hermano Mayor, nuestro guía y compañero de camino, quien nos va fortaleciendo por el camino hasta que lleguemos a la puerta de la Casa del Padre. Feliz Semana de Adviento.

 

Hna. Maria Ruth 

Radio Paulinas Boston