Cierra los ojos y piensa en un invento que haya cambiado la vida del ser humano. ¿Ya? Seguro que ha venido a tu mente la rueda, la máquina de vapor o, incluso, los ordenadores y el teléfono móvil. Pero… ¿y el papel? Nuestra vida habría sido muy diferente sin esas hojas que usamos todos los días. Gracias a él escribimos, leemos, envolvemos regalo y hasta decoramos las paredes de nuestras casas.

Y, sin embargo, lo valoramos poco. No nos cuesta nada deshacernos de él y, aunque cada vez lo reciclamos más, su mal uso implica la deforestación de amplias zonas de bosques y la contaminación de ríos y mares.

Consciente del problema, Gala Freixa , una joven barcelonesa afincada en Madrid, decidió montar su propia empresa y dedicarla a luchar contra esa situación. Un proyecto que usaría el papel para concienciar sobre el medio ambiente. Su nombre: Sheedo.